Por Albert Morral, jefe de Grupo de Infraestructura verde, y Dolores Caballero, coordinadora de Producción de Infraestructuras verde.
La obra de recuperación y adecuación de los jardines Pla i Armengol, en el barrio del Guinardó de Barcelona, marcó un reto importante para el grupo empresarial por su envergadura, por la relevancia del proyecto y por exigir del talento multidisciplinar de Sorigué.
La rehabilitación de este espacio de 3,6 hectáreas, que fue una finca agrícola construida a principios del siglo XX y bautizada como Mas Ravetllat, fue responsabilidad de dos empresas del grupo: Constraula, especialista en mantenimiento y rehabilitación urbana, y Ambitec, empresa especializada en infraestructura verde, paisajismo y jardinería.
Este espacio era reclamado desde los años 70 por los vecinos de Horta-Guinardó como recuperación del espacio público para esta zona del barrio que también fue conocida como Torrent d’en Melis. El proyecto supuso todo un desafío en nuestra trayectoria dentro del mundo de la rehabilitación de zonas verdes, por el carácter tan mediático de la obra.
La ejecución de la misma duró 15 meses entre 2018 y 2019, y en ella participaron en total de 30 personas que trabajaron de forma directa para Ambitec durante su ejecución. Este personal fue en gran parte contactado a través del Servicio de Ocupación del Ayuntamiento de Barcelona. Además, durante toda la ejecución estuvieron a pie de obra cuatro ingenieros, entre técnicos de obras públicas y agrícolas especialistas en jardinería.
Todas las operaciones de obra civil, así como los movimientos de tierras e instalaciones, tuvieron especial cuidado en conservar el patrimonio vegetal ya existente de la finca: algarrobos, cedros y almeces de gran valor ornamental y social.
Pero, además, en todo este proyecto se plantaron en total 112 mil arbustos de más de 140 especies, como rosas, jazmines y salvias, y 105 árboles de más de veinte especies, como pinos, piñoneros, tilos, cipreses, entre otros.
En algunos de los diferentes ambientes de parque se llevaron a cabo combinaciones ornamentales similares a las existentes en la finca original. En otros espacios, en tanto, se apostó por combinar especies autóctonas difíciles de encontrar en ambientes urbanos, con el objetivo de favorecer la biodiversidad de un entorno inicialmente muy degradado.
Uno de los desafíos más importantes, para cumplir con lo planteado en el proyecto original, fue la plantación de todos los arbustos y árboles: se debían de realizar conforme se liberaban espacios para ello, una vez finalizaban los trabajos de obra civil. Este proceso implicó combinar especies con distintas épocas de plantación y con requerimientos de riego de implantación muy diferentes entre ellas.
La coordinación de estas tareas de plantación e implantación se mantuvo más allá de la entrega de la obra; durante el transcurso del primer año de la apertura del parque hemos seguido realizando esta tarea.
Dentro del proyecto de los nuevos jardines Pla i Armengol, hemos logrado además la naturalización de cuatro estanques originales que actualmente ya se gestionan sin hacer uso de productos químicos. Este hecho ha permitido el fomento de ecosistemas propios de ambientes húmedos, promoviendo así la presencia de anfibios, aves y también invertebrados acuáticos.
Otro aspecto altamente destacable de este proyecto es que ha respetado el ciclo natural del agua, contrarrestando el efecto impermeabilizante de la ciudad. Todo el recinto del parque está diseñado como un gran sumidero de agua de lluvia que filtra al acuífero, liberando la carga del circuito de alcantarillado.
El resultado final de esta rehabilitación se vio premiado con la nominación de los nuevos jardines del Doctor Pla i Armengol como obra finalista de los Premios FAD de Arquitectura e Interiorismo 2020 en la categoría Ciudad y Paisaje.
Los jardines del Doctor Pla i Armengol son actualmente una pieza clave del corredor verde Ciutadella-Collserola, un proyecto de ciudad que tiene como objetivo conectar los espacios naturales entre mar y montaña, facilitando el movimiento de la flora y la fauna entre el parque de la Ciutadella y el parque natural de Collserola.